Una receta sencilla que te llevará poco tiempo en la cocina y que te transportará a los mejores días de tu niñez. En media hora podrás disfrutar de una deliciosa hornada lista para mojar en la leche de tu desayuno. Sigue el paso a paso de esta receta de magdalenas caseras, tan ricas como las que te ponía tu abuela para desayunar o merendar, y no fallarás.
Esponjosas, tiernas y elaboradas con nuestros sabrosos huevos camperos, puestos por las gallinitas de Pazo de Vilane, que disfrutan de verdes pastos gallegos todos los días del año. Además de briznas de hierba, flores o insectos, su alimentación se basa en maíz y leguminosas de alta calidad, lo que se traduce en unas gallinas hermosas y sanas, que ponen unos huevos únicos, de sabor y aroma intensos. Puedes encontrarlos en toda España, en cualquiera de estas tiendas.
Te imaginarás que, con estos huevos, nuestras magdalenas saben de otra manera…
Algunos consejos para conservar tus magdalenas más tiempo
- Lo primero de todo, deja enfriar las magdalenas por completo (una hora o más desde que las saques del horno). Comprueba que estén frías tocándolas, o incluso abriendo alguna.
- Elige un recipiente hermético (un taper, mejor de cristal, con una tapa que cierre muy bien). Es importante que no queden montadas. Usa papel de hornear para separarlas, si es necesario.
- De esta forma, te aguantarán unos 4 o 5 días tiernas.
- También se pueden congelar. Es cierto que no estarán como recién horneadas, pero mantienen bastante bien la humedad con este método de conservación.
- Eso sí, antes de meterlas en el congelador, introdúcelas en una bolsa para alimentos y ciérrala bien. Ten cuidado de que no queden aplastadas. Podrás ir sacando las que necesites.
Ingredientes
- 4 huevos Pazo de Vilane
- La ralladura de 2 limones
- 200 g de harina
- 150 g de azúcar
- 10 g de levadura en polvo
- 80 g de mantequilla derretida
- 1 yogur griego natural
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- Una pizca de sal
Elaboración
- En un bol vierte el azúcar, los huevos Pazo de Vilane, la esencia de vainilla y la ralladura de los dos limones. Bate con unas varillas hasta obtener una cremita.
- Agrega la mantequilla derretida junto al yogur y vuelve a batir para integrar.
- Mezcla en un bol aparte la harina, la sal y la levadura. Ve integrando en la masa con cuidado, para que no queden grumos. Una vez obtengas una masa homogénea consérvala durante una hora en el frigorífico.
- Coloca unas cápsulas de papel en un molde y con ayuda de un dispensador de helado coge la masa y rellena 3/4 partes de cada cápsula.
- Espolvorea un poquito de azúcar por encima e introduce en el horno precalentado a 220º, durante 10 minutos.
- Transcurrido este tiempo, baja a 200º y deja otros 5 minutos más.
- Comprueba si están listas pinchando con un palito de brocheta o el borde de un cuchillo. Si sale limpio, tus magdalenas están en su punto; si la masa se pega, déjalas unos minutos más.