No hay quien supere esta receta: el comodín más básico de la repostería, el bizcocho súper sencillo y delicioso. ¡Y también el más fácil!
No mancharás la cocina, tardarás un santiamén y tendrás a mano un alimento delicioso para desayunos y meriendas (o para darse un caprichín entre horas).
Sigue nuestros pasos y no fallarás.
Bizcocho de yogur: todos los trucos para cocineros novatos
- El yogur puede ser natural o de limón, según prefieras. Mejor si es entero.
- Los huevos deben ser camperos, de verdadera calidad, como los de Pazo de Vilane, puestos por gallinas criadas en libertad, en pastos verdes. Puedes encontrarlos en todos estos puntos de venta.
- Para que tu bizcocho suba bien, sigue estos tres pasos: precalienta antes el horno, bate con varillas y no abras la puerta del horno mientras se esté haciendo. Hazlo así y no fallarás.
- También es importante que tanto los huevos y como la mantequilla estén a temperatura ambiente.
- Para evitar que el bizcocho baje de golpe al final, respeta el último paso: el reposo de 10 minutos dentro del horno con la puerta entreabierta.
- Por último, no intentes desmoldarlo antes de que se enfríe del todo: te costará mucho más o, lo que es peor, se te romperá.
Ingredientes
- 4 huevos
- 1 yogur
- 2 medidas de azúcar (vaso del yogur)
- 1 medida de aceite de girasol
- 3 medidas de harina de repostería
- 1 sobre de levadura
- Ralladura de un limón
- Un pellizco de sal
- Mantequilla para el molde
Elaboración
- Precalienta el horno a 180ºC durante 10 min. Echa el yogur en un cuenco aparte y reserva.
- En un cuenco grande, bate con unas varillas los 4 huevos y 2 medidas del yogur de azúcar.
- Añade el yogur y una medida de aceite de girasol.
- Tamiza la harina en un cuenco aparte, mide 3 vasos e incorpora a la masa. Echa el sobrecito de levadura y sigue batiendo.
- Ralla la corteza del limón (sólo la parte amarilla, pues la blanca amarga).
- Mete en el horno sobre la rejilla, a 180ºC, calor arriba y abajo, durante 30-40 minutos (depende de tu horno).
- Comprueba si está hecho introduciendo la punta de un cuchillo. Si sale limpio, está hecho.
- Apaga el horno, entreabre la puerta y déjalo reposar 10 minutos más.
- Saca la rejilla y déjalo sobre una encimera.
- Cuando esté totalmente frío (no antes) desmolda.