Uno de los postres más clásicos. Fácil de hacer, si te vas a iniciar en el mundo de la repostería, esta es la mejor receta para comenzar. Además puedes modificar la cantidad de cacao para que su sabor sea más o menos intenso, dependiendo de si te gusta que tenga un ligero aroma a chocolate o si prefieres degustar toda la intensidad de un buen cacao en cada bocado. El resultado será un bizcocho muy esponjoso que no quedarán ni las migas.
Ingredientes
- 3 huevos de Pazo de Vilane
- 1 yogur natural
- Harina (2 medidas de yogur)
- Cacao en polvo (1 medida de yogur)
- Azúcar (2 medidas de yogur)
- Aceite de oliva (1 medida de yogur)
- 1 sobre de levadura
- Mantequilla
Elaboración
- Vacía el yogur en un bol para usar el envase como medidor. Precalienta el horno a 180 º durante los 10 minutos que te va a llevar hacer la mezcla.
- En un bol añade los huevos y el azúcar y bátelos. Añade el aceite y el yogur, sigue batiendo hasta que quede una mezcla sin grumos.
- Añade la levadura y harina tamizados con un colador. Los mezclamos todo quedando una masa sin grumos.
- Añade el cacao y mezcla bien. Verás que torna a un color muy oscuro.
- Unta el molde con mantequilla y vierte la masa en el molde y colócalo en el horno, a altura media. Mantén una temperatura de 180 º durante unos 30 minutos.
- Ahora toca la prueba del palillo. Pincha con un palillo el bizcocho y si sale sin restos pegados que está listo. Apaga el horno, sácalo y déjalo reposar unos minutos antes de desmoldarlo.
- Puedes añadir naranja rallada a la mezcla o acompañarlo de trocitos de chocolate blanco