Hoy recuperamos la receta de tortilla guisada, un espectacular plato de la cocina tradicional que hacían nuestras queridas abuelas cuando había sobrado tortilla de patata (cosa rara, la verdad) el día anterior.
La tortilla en salsa -o tortilla guisada- nos gusta tanto que la hacemos muy a menudo, ya sea como comida de diario o de fiesta, y no sólo como forma de recuperar una tortilla que haya quedado algo seca, sino como delicia culinaria. Pruébala y verás cómo no dejas de hacerla.
Algunos trucos a tener en cuenta para hacer una tortilla guisada o tortilla en salsa espectacular
- Que no te vuelva a pasar. Si tu tortilla de patata te ha quedado seca (y por eso quieres hacer tortilla guisada), es probable que debas añadir más cantidad de huevos la próxima vez. Verás cómo te queda más jugosa.
- La tortilla guisada admite múltiples variantes. En este caso hemos elegido una salsa de cebolla y azafrán, pero también queda estupenda con una salsita de tomate, con un pisto ligero o con un mojo picante.
- Si no te gusta encontrarte con trozos de verdura, pasa la salsa por la batidora antes de comenzar el guiso. Añade, en este caso, un poco más de agua y, si es necesario, un chorrito algo más generoso de vino. Ve probando y ajustándolo a tu gusto.
- No alargues mucho tiempo el guisado de la tortilla, apenas el tiempo suficiente para empaparse con los jugos y sabores.
- Este plato se conserva perfectamente en la nevera y es ideal si tienes invitados, pues se trata de una versión mucho más original que la clásica tortilla de patata. Sírvela en platitos o cucharones de aperitivo individuales, con la salsa más espesa (puedes añadir algo más de harina cuando la estés cocinando).
Ingredientes
- 6 huevos camperos Pazo de Vilane
- 1 kilo de patatas
- 2 cebollas o cebolletas grandes
- 1 cucharadita de harina de trigo
- ½ vaso de vino blanco
- ¼ vaso de agua
- Una pizca de hebras de azafrán
- Aceite de oliva
- Sal
Elaboración
- Pela, lava, corta las patatas y fríelas a fuego medio en aceite de oliva, hasta que estén tiernas junto con una cebolla grande, bien picadita. Añade sal.
- En otra sartén agrega tres cucharadas de aceite de oliva y pocha suavemente otra cebolla. Cuando comience ablandar y a estar suave incorpora la harina rehogándola, sin parar de remover.
- Calienta el vino blanco y el agua durante unos segundos en el microondas. Agrega las hebras de azafrán para que se hidraten y vierte el resultado sobre la cebolla pochada. Mezcla y cocina removiendo durante 4-5 minutos, o hasta que el alcohol se evapore. Prueba de sal y reserva.
- Una vez estén listas las patatas y la cebolla (blanditas, no crujientes) escúrrerlas y pásalas a un bol grande. Añade los huevos ya batidos con una pizca de sal.
- Engrasa ligeramente una sartén antiadherente y cuaja la tortilla por ambos lados.
- En una cacerola baja coloca con cuidado la tortilla y báñala con la salsa. Deja que se cocine unos minutos a fuego suave. Mueve la cazuela circularmente, para evitar que se pegue.
- Sírvela todavía caliente.
