Aunque es verdad que tenemos la suerte de poder consumir hortalizas todo el año, los tomates, pimientos y calabacines saben todavía mucho más ricos cuando llega el buen tiempo. Los tomates tienen otro color, aroma y sabor, y los pimientos parece que se «salen» de la sartén. Por eso, nos ha parecido una idea excelente recoger los primeros frutos de la huerta y hacer un pisto completo, con sus huevos al horno coronándolo. Menudo platazo, delicioso y con ingredientes naturales que nos da la naturaleza.
Por supuesto, y si en el caso de las hortalizas la calidad importa, en el de los huevos camperos es fundamental. Elige los que ponen nuestras gallinas de Pazo de Vilane, que comen pasto verde y bichitos del campo gallego todos los días. La libertad se nota… y mucho. Y aunque no vivas en Galicia, podrás encontrar nuestros huevos en toda España. Aquí tienes un buscador en el que podrás localizar tu establecimiento.
¡Vamos con él!
Los trucos imprescindibles para que el pisto manchego te salga aún más rico
- Este plato se puede hacer todo el año, pero te quedará mucho mejor si lo elaboras en primavera o en verano, cuando las hortalizas que lleva la receta están de temporada.
- Puedes combinar dos o tres tipos de variedades de tomates que te gusten; esto aportará mayor sabor y textura al plato.
- Corta todas las verduras en trocitos del mismo tamaño (aproximado), de ese modo el guiso te quedará mucho más ligado y todos los ingredientes participarán por igual en cada bocado.
- Por otro lado, sigue el orden de cocinado de las verduras que te proponemos, precisamente para evitar que unas te queden muy duras y otras, por el contrario, pierdan su jugo.
- Los huevos necesitan apenas 10-15 minutos en el horno, hasta que veas que las claras han quedado cuajadas.
Ingredientes
- 1 cebolla grande
- 5-6 tomates rojos y maduros
- 1 pimiento rojo grande
- 2 pimientos verdes
- 1 calabacín
- 4 huevos camperos Pazo de Vilane
- Aceite de oliva virgen extra
- Perejil picado fresco
Elaboración
- Corta en juliana la cebolla y póchala despacio con aceite de oliva
- Pela los tomates y córtalos igualmente en trocitos. Añade a la sartén.
- Corta el pimiento rojo (eliminando las semillas). Haz lo mismo con el pimiento verde y añade ambos al sofrito.
- Por último, corta en pequeños trozos el calabacín (con o sin piel, a tu gusto) e incorpóralo.
- Rehoga todo bien despacio, el tiempo que sea necesario o hasta que las verduras estén a tu gusto (más o menos crujientes). Añade un poquito de agua si el pisto no está muy jugoso, con algo de caldo.
- Luego, coloca el pisto en una fuente de barro, casca unos huevos fritos por encima y llévalo al horno unos minutos (a unos 180 grados). Dependerá del horno, pero en aproximadamente 10 minutos los tendrás listos.
- Espolvorea todo con perejil fresco picado por encima y sirve todavía calentito.