Fácil, sanísimo y rápido de preparar. En esta ensaladilla, el pulpo y las gambas aportan ese toque “lujoso” que todo entrante festivo necesita, mientras que el melocotón introduce jugosidad y el especial “factor sorpresa”. La patata, los huevos cocidos camperos y la mayonesa (ingredientes que siempre hacen buenas migas) hacen el resto.
Los brotes verdes y germinados no sólo coronan el plato con su vistosidad y colorido: también te asombrarán con sus distintas e inesperadas texturas crujientes.
Ingredientes
- Patatas
- Gambas crudas
- Una pata de pulpo cocida
- Medio melocotón
- Huevos frescos camperos Pazo de Vilane
- Sal
- Pimienta
- Aceite
- Brotes verdes/germinados
Elaboración
- Cuece las patatas en abundante agua con sal durante 20 a 25 minutos.
- Mientras tanto, pela las gambas y reserva las cabezas. Da un hervor a las gambas y aparta.
- Marca en una sartén, a la plancha, la pata de pulpo cocida.
- Corta en dados las gambas, la pata de pulpo y el medio melocotón. Salpimenta y reserva.
- Cuece un huevo campero Pazo de Vilane, pícalo finamente y apártalo.
- Marca con un golpe fuerte de sartén las cabezas de las gambas que habías reservado. A continuación, confita a temperatura suave, es decir, añade aceite –suficiente como para luego hacer una mayonesa- y deja que se hagan las gambas a fuego muy bajo durante unos 15/20 minutos.
- Cuela el aceite obtenido y monta con un huevo o dos (dependiendo de la cantidad de ensaladilla que vayas a servir) la mayonesa.
- Finalmente, mezcla todos los ingredientes, procurando no añadir demasiado melocotón (para que lo encuentres por sorpresa en cada bocado y sea un inesperado y sutil punto dulce).
- Adorna cada vasito con algún brote verde o germinado.
- Tip extra: Si sois muchos y quieres hacer una comida de picoteo, puedes servir esta riquísima ensaladilla en porciones individuales, en vasitos.