- – relación cara a cara;
- – relación desde la expresión de la persona en cada momento y no desde el rol o el currículum;
- – número reducido de miembros;
- – relación permanente durante el tiempo que dura el encuentro. Grupo cerrado y constante. En nuestro caso: dos encuentros intensivos de viernes a domingo en el que participan las mismas personas de inicio a fin.
3 mayo 2018
Por Ana Belén Batres García (*).- Llegamos a este mundo formando parte de un grupo primario, la familia de origen, y nos vamos desarrollando en otros grupos secundarios como son la escuela, el grupo de amigos, trabajo, formación reglada, formación no reglada, etc… Así como también formamos parte de otros grupos macro como son la ciudad en la que vivimos, la nación, etc… hasta pertenecer de manera global al grupo de la humanidad. Hay muchos más grupos y de toda índole, ya que el grupo es donde ocurre la vida.
Para abordar el contexto grupal en Emprender desde la raíz nos vamos a centrar en un tipo muy concreto y particular de grupo que podríamos nombrar como “grupo mixto de encuentro y aprendizaje”, que tiene apenas un siglo de recorrido en la sociedad industrializada de occidente. Surge desde la psicología social y los movimientos sociales (como el feminismo) a mitad del siglo XX, en respuesta a la problemática social generada después de la segunda guerra mundial.
En este siglo de recorrido, la dinámica de grupo ha generado mucho material de estudio y como práctica ha ocupado y se ha asentado de manera fulgurante en numerosos y variados espacios de encuentro de diferentes ámbitos, como son el de la salud, la educación formal e informa, el arte o la espiritualidad.
En base a él lanzamos esta propuesta de grupo intensivo práctico y vivencial en Emprender desde la raíz. Por la confianza que tenemos en el grupo como espacio de encuentro y crecimiento de las personas que lo integran.
Para mí, y sé que no soy la única afortunadamente, que llegue al mundo de la psicoterapia a través del grupo y que me muevo en él de manera constante, ya sea como participante o facilitadora, el grupo es territorio sagrado… y esto tiene que ver con ese todo que es más que la suma de las partes, tiene que ver con la unidad, con la hermandad, con la pertenencia…
Es “un todo” difícil de definir o explicar a nivel teórico y es “un todo” fácil de percibir y saborear a nivel práctico cuando formas parte del trabajo de dinámica grupal.
Las características principales de este tipo de grupo y que desarrollaremos en Emprender desde la raíz, son: