Te presentamos las 6 diferencias básicas entre las gallinas camperas y las gallinas criadas en suelo, para que puedas distinguir cómo se producen los huevos de unas y otras. Atención, porque el bienestar animal y la calidad de tu alimentación son dos puntos clave.
1. Las gallinas camperas salen a diario a pastorear, las de suelo, no
Las gallinas camperas de Pazo de Vilane salen a diario al exterior a pastorear, ya que disponen de 4 m2 de parque para cada una. Así, una manada pequeña, de 5.000 gallinas, como las que tenemos en el Pazo, pueden disfrutar de 20.000 m2 de parque exterior. Es decir, el espacio de casi tres campos de fútbol.
En Pazo de Vilane, concretamente, cuentan con prado verde gallego todo el año, lo que les permite incorporar a su dieta lo que obtienen en el pastoreo, además del bienestar que estos paseos les proporcionan.
Por el contrario, las gallinas de suelo no salen al exterior: permanecen durante toda su vida en un gallinero. Esta es la diferencia fundamental con las camperas.
Un truco fácil de recordar: las gallinas de suelo pisan suelo (de gallinero)… Las camperas, campo.
2. Los criterios de bienestar animal son muy diferentes en campero y en suelo
Las de suelo (a veces denominadas “gallinas libres de jaulas”) viven siempre en el interior de una nave, y en ocasiones en varias alturas, los denominados aviarios.
También hay que tener en cuenta que los productores de huevo de suelo suelen tener un perfil industrial, es decir, trabajan con unidades muy grandes, de 30.000-50.000 aves, e incluso mayores. Suelen ser productores procedentes de la cría en jaulas, por ello su modelo es el de macro-granjas.
La libertad que les proporciona a las gallinas camperas el pastoreo ayuda a su bienestar. Pueden estirarse, darse baños de arena (un comportamiento instintivo muy beneficioso para ellas), estirar las alas y ejercitar las patas -evitando así la descalcificación propia de la inmovilidad- y recibir los rayos de sol durante largas horas.
Sin embargo, las gallinas de suelo necesitan instalaciones con climatización industrial y regulación artificial de la luz.
En las gallinas camperas la regulación de las horas de luz (necesaria para su ciclo de puesta, es decir para que pongan huevos) se da naturalmente. En verano, por ejemplo, las gallinas camperas de Pazo de Vilane reposan bajo la sombra de los árboles y regulan su temperatura al aire libre.
3. Las gallinas de suelo no complementan su dieta, las camperas, sí
Las gallinas camperas de Pazo de Vilane se alimentan de un pienso de máxima calidad procedente de grano entero y sin ningún componente procesado. Además, ellas mismas se procuran ricos suplementos naturales en sus salidas campestres, siguiendo su instinto natural.
Así, picotean hierbas y hojas, que les suponen un importante suplemento de fibra y vitaminas; gusanos e insectos, que se traducen en proteínas, aminoácidos y algunas vitaminas (K y del grupo B, principalmente); e ingieren piedrecitas, que no sólo les suplementan con minerales, sino que ejercen la función de molino en la molleja. De este modo, hacen mucho mejor la digestión y su metabolismo funciona óptimamente.
Las gallinas camperas de Pazo de Vilane disfrutan de pasto verde los 365 días del año, gracias a la suave climatología gallega.
En definitiva, las gallinas camperas complementan su dieta con todo lo que encuentran en el campo, siguiendo su instinto natural. Las de suelo no tienen esa posibilidad.
4. Gallinas de suelo, camperas… y sus distintas denominaciones
En las cajas de huevos a veces figuran distintas denominaciones para las gallinas de suelo.
Por ejemplo, los huevos de suelo también a veces se autodenominan como “procedentes de gallinas libres de jaula”. Esto puede llevar a confusión con los huevos camperos o huevos de gallinas en libertad que, como hemos visto, son cosas diferentes.
En otras ocasiones, no se aprecia a simple vista, en letra grande, por lo que tendrás que buscar el detalle en la etiqueta informativa del estuche o caja donde debe constar la forma de cría.
También lo podrás distinguir por el código que aparece en la cáscara del huevo: el código 1 indica huevos camperos, el 2, huevos de gallinas de suelo, y el 3, huevos de gallinas de jaula.
En el caso de Pazo de Vilane, nos reconocerás a la primera: por nuestra “caja de la gallinita” (inconfundible) y por la denominación a la que estamos obligados por ley «gallinas camperas».
Por tanto, no te confundas cuando veas la denominación “ huevos procedentes de gallinas libres de jaula”, porque este producto no procede de gallinas que pastan en libertad en el exterior.
Eso solo lo hacen las gallinas camperas o las ecológicas.
5. La vida es muy distinta para las gallinas camperas y las de suelo
Como hemos dicho, las explotaciones de gallinas de suelo suelen estar formadas por naves donde se pueden criar incluso hasta 80.000 aves, e incluso más. Con estas densidades los estándares de bienestar animal son muy diferentes a los que se aplican a las gallinas camperas de Pazo de Vilane.
Todo en Pazo de Vilane está pensado para imitar las condiciones de la vida en libertad de las gallinas.
En el Pazo la vigilancia de los cuidadores es constante: revisan gallineros y nidos varias veces al día, miden las condiciones del agua o del pienso y vigilan los comportamientos jerárquicos (picaje o cualquier otro que pueda perjudicar a las gallinas).
6. Los verdaderos huevos camperos, siempre en producciones pequeñas
Afortunadamente, cada vez estamos más concienciados y exigimos como consumidores huevos “como los de antes”, únicos, llenos de sabor y aroma, puestos por gallinas criadas en total libertad y con criterios de bienestar animal.
Pero sólo si se cuenta con gallineros pequeños, con amplios parques y suficientes cuidadores asignados a cada uno de ellos se producirán los mejores huevos camperos.
Eso cuesta trabajo y recursos. Los verdaderos camperos no se producen de forma industrial, sino en producciones pequeñas, con una especial atención y cuidado de las aves y su bienestar.
Por eso en Pazo de Vilane aplicamos diariamente nuestros criterios e indicadores propios de bienestar animal -respaldados por nuestra experiencia de casi 25 años como granja de gallinas camperas– lo que se refleja en la calidad de nuestros huevos.