Pazo de Vilane, empresa familiar que desarrolla su actividad en el medio rural en Galicia, ha presentado una demanda por conductas de competencia desleal.
La empresa demandada es FLUMENALI S.L. comercializadora de la marca de huevos camperos “Corral de Monegros”, con sede en Huesca, cuya caja de huevos (color, diseño, tamaño) es una copia de la caja original de Pazo de Vilane puesta en el mercado en 1997.
La demanda se basa en la Ley de Competencia Desleal (L.C.D.) al estar replicando “Corral de Monegros” aspectos relativos a la imagen de marca de Pazo de Vilane, tanto en los envases de los huevos comercializados, como en su tipografía y su página web.
La demanda pretende la cesación de las conductas ilegales contrarias a la buena fe, que suponen actos de confusión y riesgo de asociación en perjuicio del consumidor, actos de imitación y explotación de la reputación ajena.
Pazo de Vilane
La empresa familiar Pazo de Vilane es un proyecto rural gallego, desarrollado desde el año 1996 cuyo modelo de negocio ha creado una marca de huevos camperos de gallinas en libertad de gran relevancia, caracterizada por la calidad de su producto, la sostenibilidad e innovación del mismo en el entorno rural, el carácter artesanal de su producción, marcando todo ello la diferencia con el resto de los competidores.
En 1997 la caja de huevos Pazo de Vilane fue creada por el artista y diseñador gallego Pepe Barro, así como su marca, y han sido reconocidas con diferentes premios y menciones como un caso de éxito de innovación empresarial.
Pazo de Vilane fue pionero en 1996 en la introducción de este producto diferenciado en los lineales de los supermercados y de la gran distribución en España, y ha tomado la decisión de defender su esfuerzo comercial y de diferenciación de producto realizado durante los últimos años que le han permitido posicionarse como la empresa de huevos camperos más valorada por los clientes.
Piedad Varela-Portas, socia de Pazo de Vilane y Directora de Marketing y Comunicación de la compañía ha manifestado: “nos hemos visto obligados a la presentación de esta demanda por la conducta desleal de la empresa demandada, en defensa de nuestros intereses comerciales, nuestra marca y nuestro mercado. Nuestra reputación, labrada durante más de veinte años en el mercado del huevo campero hace necesario que actuemos ante semejantes conductas. Asimismo, lo hacemos en defensa del consumidor para evitar la confusión y en aras de la transparencia del mercado”.