En días de frío una sopa caliente siempre apetece. Un plato típico de nuestras abuelas, se trata de una de las recetas más humildes y famosas de la gastronomía española. Es ideal para tomar en épocas de otoño e invierno.
La sopa castellana es una receta sencilla, con pocos ingredientes y muy consumida en momentos de abstinencia como la Cuaresma y La Semana Santa, donde se demuestra que menos, es más.
Ingredientes
- 6 huevos de Pazo de Vilane
- 10 dientes de ajo
- 12 rebanadas de pan duro
- 150 g de jamón serrano
- 3 litros de caldo carne, verduras o agua
- Sal y pimienta
- 2 cucharadas de pimentón dulce
- 50 ml de aceite de oliva
Elaboración
- Pelamos y fileteamos los ajos. Cogemos una cazuela grande, calentamos aceite e introducimos el ajo.
- Salteamos hasta que comiencen a coger un color dorado. Añadimos el jamón cortado en trozos pequeños y removemos para juntar ambos sabores.
- Cuando esté doradito, añadimos 6 rebanadas de pan duro y les damos unas vueltas. Retiramos la cazuela del fuego, espolvoreamos con el pimentón dulce y removemos bien.
- Volvemos a colocar la cazuela al fuego y añadimos el caldo o agua y cocemos a fuego moderado durante unos 20 minutos
- Tostamos lo que queda de pan con aceite de oliva y lo añadimos.
- Salpimentamos al gusto y rompemos los huevos y los echamos al caldo.
- Dejamos cuajar durante 2-3 minutos y servimos muy caliente en un cuenco.