Todos, en nuestra actividad diaria, generamos CO2 y por eso mismo podemos reducir nuestra huella de carbono: las pequeñas acciones de cada uno suman mucho por la sostenibilidad y el cambio climático. Por tanto, la pelota no sólo está en el tejado de grandes iniciativas, gobiernos o empresas multinacionales. Es también nuestra responsabilidad dentro de nuestro ámbito de actuación
Estas fueron las principales conclusiones del segundo taller de Huellas Conscientes de Pazo de Vilane, nuestro gran proyecto de reducción de huella de carbono y sostenibilidad, que celebramos en enero para establecer la relación entre las actividades que realizamos a diario y sus emisiones de CO2.
Y todo ello como empresa -en nuestra actividad productiva- y como individuos.
Talleres dinámicos: reflexionamos y actuamos juntos
Los empleados y empleadas de Pazo de Vilane nos reunimos semanas atrás para celebrar unos talleres prácticos basados en actividades grupales. El objetivo era comprender e interiorizar que para cuidar el medioambiente y reducir la huella de carbono es mejor pensar y actuar como un equipo, como colectividad. Porque frente al cambio climático no podemos avanzar si no estamos unidos.
Todas las personas somos indispensables en nuestra reducción de huella de carbono
El gran proyecto de sostenibilidad de Pazo de Vilane, Huellas Conscientes, no es sólo asunto de la dirección de la empresa. También los empleados y empleadas tienen el derecho y el deber de involucrarse, es decir, participar en las soluciones y objetivos de reducción; así será mucho más fácil lograr los objetivos.
El lugar elegido para nuestro gran debate sobre sostenibilidad fue la Palleira, el antiguo pajar del Pazo, hoy día sala multiusos restaurada y ejemplo de recuperación del Patrimonio para uso social.
Todos los empleados de Pazo de Vilane participamos en este diálogo – por turnos, porque nuestras gallinas de huevos camperos necesitan cuidados constantes- y fuimos identificando la presencia de emisores de CO2 en la empresa y en nuestras vidas.
Así, establecimos los siguientes emisores o causas del cambio climático en nuestros ámbitos personales, profesionales y/o sociales:
- Trayectos que hacemos por carretera y/por aire (aunque sean esporádicos).
- Uso de electricidad.
- Consumo de productos industriales, agrícolas o ganaderos.
- Generación de residuos.
- Deforestación y cambios en el uso del suelo.
- Refrigerantes.
Muchas preguntas… pero más respuestas
¿Podríamos ahorrar o compartir desplazamientos en coche? ¿Reducir algo el consumo de luz? ¿Despilfarrar menos comida? ¿Usar menos plásticos? ¿Comprar productos bien producidos, responsables con su entorno? ¿Exageramos al refrigerar o calentar nuestras casas? ¿Cómo podríamos en Pazo de Vilane ser más eficientes con el gasto de energía?
Muchas fueron las preguntas… pero más aún las ideas concretas que fueron surgiendo. Fue un ejercicio muy positivo, pues varias de esas iniciativas podrían aplicarse sin demasiado esfuerzo en la vida de cualquier persona. Próximamente las pondremos en común con vosotros.
También reflexionamos -de la mano de la consultora especializada Cuatrotercios– acerca de las consecuencias reales del cambio climático que observamos en nuestro entorno: desastres naturales, sequías, olas de calor, propagación de enfermedades, pérdidas de cosechas, destrucción de ecosistemas y cambios en especies, alteraciones en los cultivos tradicionales, en los ciclos estacionales…
Pazo de Vilane: comprometidos con la sostenibilidad desde 1996
Desde su inicio en 1996, cuando la familia Varela-Portas decidió volver al rural para iniciar un proyecto empresarial basado en el desarrollo sostenible, Pazo de Vilane quiso ser un ejemplo de generación de riqueza y empleo en el campo gallego adoptando un modelo productivo respetuoso con el entorno.
Ya desde aquellos primeros años, teníamos claro nuestro compromiso con el medio ambiente y el cambio climático. Y esta implicación es algo más que una buena intención o un deseo. Por ello, a lo largo de estos más de 20 años de actividad, Pazo de Vilane ha aplicado medidas para reducir su huella de carbono y mejorar su sostenibilidad.
Por ejemplo, somos una granja de huevos camperos autosustentable (fuimos premiados por este motivo) porque gran parte de nuestras instalaciones funcionan con placas solares para autoconsumo.
Gracias a ello producimos energía limpia y evitamos arrojar a la atmósfera mucho CO2 cada año.
1 idea, 1 árbol: nuestra gran iniciativa sostenible
Además, estamos repoblando con especies autóctonas las fincas del Pazo (con todo lo que esto supone para el medio ambiente) gracias a la campaña 1 idea, 1 árbol, que este ejercicio cumple su 7ª edición.
En esta iniciativa, los clientes de Pazo de Vilane proponen ideas de reciclaje para dar nueva vida a nuestra conocida “caja de la gallinita”. Desde un trombón hasta un costurero, pasando por estuches para material escolar, clasificador de pilas, almacenaje para productos de limpieza o de bricolaje, soportes para café, dispensadores de papel higiénico o botiquines… (¡la imaginación de nuestros seguidores es asombrosa!).
Como respuesta al compromiso de los y las participantes en la iniciativa nosotros plantamos un árbol que en el futuro ofrecerá sombra y cobijo a nuestras gallinas.
Como ves, no hay grandes acciones sino pequeños pasos para fomentar la sostenibilidad y evitar el cambio climático. Pero, sumados, hacen mucho. ¿Quieres dar el tuyo con nosotros?